La familia Ruiz-Mateos no ha dejado de ser noticia desde la muerte del patriarca, José María, hace ya seis años. Sus seis hijos fueron condenados a penas de cárcel y su mujer, Teresa Rivero, ha visto cómo el imperio económico y familiar se derrumbaba ante su atónita mirada. Ahora, los seis hijos varones del controvertido matrimonio ya no están en prisión: han logrado el tercer grado.
Según ha podido saber Vanitatis por fuentes del entorno familiar y confirmar después con la dirección general de Instituciones Penitenciarias, los hermanos viven bajo control telemático tras cumplir condena de hasta seis años en algunos de los casos.
Las mismas fuentes señalan que los herederos del empresario viven en Madrid, la mayoría con sus familias. Algunos de ellos incluso piensan en emprender de nuevo, algo que llegará después, añaden, de que se celebre el juicio que les queda pendiente. Acaso el más problemático.
Nuevo juicio
Se trata del caso relacionado con unos pagarés, un proceso que empezó en 2011, cuando se les acusó de haber captado 337 millones de euros de 4.110 inversores a cambio de pagarés, dejando a deber 289 millones. El juicio debía celebrarse este mismo año pero todavía no tiene fecha fijada, según nos dicen.
Nada es fácil en el camino de esta familia: fue en febrero cuando el juez de Vigilancia Penitenciaria de Madrid otorgó el tercer grado a los seis hermanos. Pero la Audiencia de Palma, la encargada de su condena, revocó el tercer grado en abril a instancias del recurso de la Fiscalía. No ha sido hasta hace poco que han logrado salir de prisión.
Teresa Rivero, entre Madrid y Cádiz
Mientras, su madre, la viuda del que fuera el hombre más rico de España en la década de los 80, vive con sus hijas, Paloma y Almudena, entre Madrid y El Puerto de Santa María, casi encerrada, con la salud deteriorada pero el carácter fuerte como siempre.
Nos lo cuentan desde su entorno, quienes nos hablan del documental que estrena este miércoles RTVE Play sobre el controvertido empresario. La familia no quiere saber nada del filme ‘Ruiz-Mateos, el primer fenómeno viral’, una serie de cuatro capítulos dirigida por el prestigioso cineasta Roger Gual.
Los hijos, nietos y biznietos del empresario, así como su mujer, viven ajenos a la prensa, casi escondidos de lo que se pueda decir de ellos, y desde su entorno no ven con buenos ojos que ahora se emita algo sobre sus vidas. “En estos momentos les viene mal, muy mal”, nos advierten. Porque los seis hermanos están a la espera de un gran juicio que podría aumentar las penas de prisión que ya cargan.
María Teresa Rivero ha pasado este año más tranquila que el anterior, el de la dureza de la pandemia. Aquel año, en noviembre tuvo que ser ingresada por una rotura de cadera fruto de una fuerte caída. Fue hospitalizada en el hospital Puerta de Hierro de Madrid. La cuestión se complicó cuando los médicos le diagnosticaron una neumonía producida por el contagio de coronavirus.
Dirigido por Roger Gual
Producida por RTVE en colaboración con Lavinia Audiovisual y dirigida por Roger Gual, la serie documental se estrena este miércoles 27 de octubre en la plataforma de contenidos y directos del canal público. ‘Ruiz-Mateos, el primer fenómeno viral’ se ha filmado durante meses, cuenta con documentación histórica, y reúne a más de 40 protagonistas, entre amigos íntimos, colaboradores de confianza y periodistas que siguieron de cerca sus andanzas.
Además, algunas de las víctimas de Ruiz-Mateos ofrecen en este documento una crónica inédita sobre su vida: desde sus orígenes bodegueros en Jerez hasta su ocaso, después de levantar y ver caer dos imperios empresariales.
La trama viene marcada por la expropiación en 1983 de Rumasa por parte del entonces nuevo Gobierno socialista de Felipe González. El acontecimiento marcó la agenda política de España durante décadas, al empezar Ruiz-Mateos una guerra sin tregua ni cuartel contra el Estado. El empresario atacó directamente al ministro de Economía de la fecha, Miguel Boyer, pareja de Isabel Preysler, un matrimonio que se convirtió en la diana de los ataques de Ruiz-Mateos.
Boyer y Preysler
Tras haberse convertido en el hombre más rico del país, el andaluz realizó un descenso a los infiernos que le llevó a protagonizar míticas escenas, como el legendario puñetazo a Boyer o aquella ‘performance’ disfrazado de Superman, además de sonadas fugas de la policía rodeado de su equipo de confianza, encabezado por el guionista de su ‘guerrilla mediática’: Javier Sáinz Moreno.
Protagonista de “postales imperecederas para varias generaciones”, tal y como señalan desde RTVE, Ruiz-Mateos levantó un segundo imperio, Nueva Rumasa, junto a sus hijos varones y convirtió a su esposa en la presidenta del Rayo Vallecano.
Y, según dicen desde la televisión pública, “la de Ruiz-Mateos es una historia sin comparación, cargada de esperpento y disparate, acusaciones de corrupción política y económica, fervor religioso, alocadas acciones mediáticas e imágenes que forman parte de la memoria colectiva de España”.
Una memoria que ahora mismo su familia no quiere recordar porque tiene la mirada puesta en su futuro más inminente. Y ese podría pasar por engrosar las condenas carcelarias de los seis hijos varones del matrimonio, quienes fueron educados para tomar las riendas del padre cuando este ya no estuviera. “El día que me muera, mi soberbia morirá un día después”, solía decir el empresario entre bromas a sus amigos, nos cuentan. Parece que incluso se ha mantenido intacta tras años de su muerte.
FUENTE: Vanitatis