El Circuito de Jerez calienta motores para el Gran Premio de España de este fin de semana

  • Fabio Quartararo en MotoGP, Remy Gardner en Moto2 y Pedro Acosta en Moto3, llegan líderes del campeonato en sus respectivas categorías

El Gran Premio Red Bull de España de MotoGP 2021 calienta motores y tras la cita portuguesa celebrada en el trazado de Portimao, el MotoGP ya está en Jerez, sede de la cuarta cita de la temporada. El paddock jerezano, es un continuo ir y venir de trabajadores de la organización MotoGP y del circuito, afanados en las tareas de montaje de estructuras y carpas, cableado para televisión, montaje de la publicidad y puesta a punto de las instalaciones para que todo esté listo el viernes con la apertura de la pista para los primeros entrenamientos oficiales. Entre ayer y hoy montan sus ‘hospitalities’ los respectivos equipos en espera de poder acceder mañana a los boxes asignados para realizar el montaje e instalación de los pits.

De cara al Gran Premio, la pista jerezana no presenta novedades importantes con respecto a las dos ediciones celebradas el año anterior, salvo la inclusión este año de paneles luminosos de señalización a modo de banderas electrónicas que complementarán a las banderas tradicionales en algunos puestos de comisarios, y la ampliación (50 cm) de los márgenes en ambos lados de la pista entre las curvas 5 y 6.

Un Gran Premio, un año más, marcado por la pandemia mundial del Covid-19 y por tanto disputado a puerta cerrada sin la presencia y el calor del público en las gradas y bajo estrictas medidas de seguridad y sanitarias ya vistas e implantadas el año anterior con el objetivo de mantener una burbuja verde entre todos los miembros de la colonia MotoGP.   

En la categoría reina, MotoGP, el francés Fabio Quartararo encabeza la general del campeonato con 61 puntos tras las dos últimas victorias consecutivas en el Gran Premio de Doha y Portimao y la quinta plaza que obtuvo en el Gran Premio inaugural de Qatar. Y llega a un circuito que el año anterior se le dio muy bien, no en vano, tras la incertidumbre del inicio del campeonato, finalmente el MotoGP se puso en escena en Jerez en el mes de julio con una doble cita muy muy calurosa donde dominó el joven francés que se adjudicaba el triunfo en ambos grandes premios -España y Andalucía-. Una cita la de 2020 llena de incertidumbres generadas por la pandemia que finalmente se convertiría en una prueba de fuego para Dorna Sport y el trazado jerezano y que se saldó con un rotundo éxito organizativo y sanitario.

Por detrás del francés del equipo Yamaha Monster en la general, se encuentra el italiano Francesco ‘Pecco’ Bagnaia que con la Ducati, es segundo con 46 puntos y dos pódiums en su haber, una tercera plaza con la que inauguraba la temporada en Qatar y la segunda de Portimao, a la que sumaba una sexta en el GP de Doha. Por su parte, el español Maverick Viñales es tercero de la general con 41 puntos, 20 por debajo del líder, tras su arrollador inicio de temporada en el primer gran premio de la temporada en la que obtuvo la victoria pero que después no ha podido corroborar con otras grandes actuaciones al concluir quinto en el GP de Doha, mientras que en Portimao, lograba una lejana décimo primera plaza, muy lejos de los puestos de cabeza.

Pero si en MotoGP hay un piloto en el que estarán puestas todas las miradas, ese es Marc Márquez. Y es que el español del equipo Honda Repsol, regresa al punto de partida, al circuito donde el año pasado sufrió la importante lesión que lo ha tenido alejado de las pistas por un período de casi 9 meses. Con el alta médica en las manos para regresar al mundial, el piloto español lo hizo en Portimao donde consiguió una meritoria séptima plaza. Pero más que una carrera contra el resto de competidores, fue una carrera personal contra sí mismo. Han sido muchos meses de incertidumbres, con paso por quirófano en tres ocasiones. Todos esos nervios, ansiedad y desvelos a lo largo de este tiempo salían a flote tras pasar por meta en séptimo lugar en Portugal no pudiendo reprimir las lágrimas de emoción al saberse de vuelta y que todo el esfuerzo mereció la pena, volviéndose a sentir piloto. En Jerez, el piloto de Cervera no tiene unas metas definidas e irá poco a poco con la misma prudencia con la que actuó en Portugal como así lo reflejaban las declaraciones que ha efectuado a través de su equipo. ‘Nos planteamos Jerez de la misma forma que Portimao. Estamos aquí para seguir mejorando paso a paso y hacer el mejor trabajo que podamos. Mi recuperación continúa y lo importante es que sigamos mejorando nuestra consistencia’.