- La sala expositiva de Canal Sur en Cádiz acoge, desde el 6 de abril, la exposición ‘Segunda vuelta al patio’, de Rocío Fontán, en la que propone jugar con nuestro niño interior por medio de esta técnica decimonónica
La periodista Rocío Fontán da un paso más en su experiencia creativa y expone su nuevo proyecto ‘Segunda vuelta al patio‘, más de media docena de cianotipias con las que propone al espectador un regreso a los patios infantiles a través de sus plantas. La periodista ahonda en esta técnica decimonónica para recordar sus vivencias en el patio de la Calle de Las Naranjas de Jerez, donde se crió junto a sus abuelos, José Paz y Carmen Coiras.
Fontán elige la técnica de la cianotipia, el principio de la fotografía, para hacer un homenaje a la primera fotógrafa de la historia, Anna Athkins, una mujer que consiguió elaborar el primer volumen ilustrado, precisamente de plantas. “Es vital que se reconozca el papel de las mujeres en todas las artes y, en concreto, en la fotografía porque tenemos la suerte de que el primer libro ilustrado viene de las manos de una mujer que no paró hasta conseguir un método que pudiera plasmar las plantas”.
Asimismo, insta al espectador a que juegue a viajar a su propio patio, un habitáculo que se convierte en testigo de las vivencias de sus moradores y que resume la idiosincrasia de Andalucía y la particular forma de vivir de sus gentes alrededor de este espacio. “Mi objetivo es que, en estos tiempos complicados, nos tomemos un rato para jugar con nuestro niño interior, viajemos a nuestra infancia y nos divirtamos soñando”, comenta.
Continuación y evolución
Este proyecto, continuación de ‘Vuelta al patio’, que mostró en diciembre en Jerez, da un paso más, con la intervención de las cianotipias. Es un proceso de deconstrucción y construcción porque, en primer lugar, elabora las cianotipias en las que las plantas se deconstruyen para quedar convertidas en sombras y después les aporta color (bronce, oro y plata) para volverlas a construir. Un peldaño más en su investigación de las cianotipias y cómo actúan con nuevos pigmentos, realzando algunas partes de la obra para destacarlas.
Asimismo, aumenta el abanico de plantas escogidas que van desde los Helechos (en sus diversas variedades), Costilla de Adán, Philodendro xanadu, Hiedra, Acanto, Falso Pimentero y Vinagretas. “He escogido esta selección de plantas para ir más allá del patio, pero siempre con la idea de volver a la infancia, por eso, he jugado mucho con las vinagretas, convirtiéndolas en mariposas y corazones. Quién no recuerda haber mordisqueado las vinagretas de pequeño y considerarse un aventurero, eso quiero que sienta la gente, que vea los cuadros, que viajen a su infancia y sean felices”.
Asimismo, en esta exposición aumenta los tamaños de los cuadros, optando por papeles de mayor envergadura “no ha sido fácil trabajar con unas dimensiones tan grandes, pero ha merecido la pena porque este tamaño te deja componer, no sólo te ciñes a captar las plantas, sino que puedes crear bosques, mariposas que vuelan, o campos recién segados. Ya no es la aventura de recrear plantas, es la sensación de contar historias”.
Cuernas a la última moda
La jerezana completa la exposición con dos cuernas de ciervo que ha pintado en colores pasteles. La primera esconde en el rostro pequeños trozos del mapamundi decorado con una pátina de oro. Ambas cornamentas aparecen coloreadas en tonos pastel, dorado y blanco. Un detalle más con el que Rocío Fontán quiere darle una vuelta de tuerca a los adornos más tradicionales de las casas de la zona. “Siempre que he entrado en una casa donde había cuernas colgadas me ha impresionado, por eso, he jugado a crear una imagen más contemporánea, con colores que se llevan y así rebajar la impresión que provocan los cuernos”.
Una buena oportunidad para divertirse y tomarse un respiro.
(Información: www.canalsur.es)