IN MEMORIAM | a Francisco Paullada, por Pepe García Ganaza

Se nos fue Paco. Francisco Paullada Alcántara. Inventor. Fue muchas más cosas, pero sobre todo fue inventor. Y si algo no fue invento suyo, tuvo la habilidad de aplicarlo. A Paco se le ocurrían cosas geniales. Fue el primero en poner megafonía en las playas de Sanlucar de Barrameda y Valdelagrana. Si, en esa caseta de control del final de la Calzada de la Infanta o en la de la Avenida 25 años de Paz, nombre franquista de la principal calle de la urbanización portuense. Paco y su equipo daban avisos por la megafonía y entre aviso y aviso, unos minutos para publicidad.

Se le ocurrió montar una emisora de radio tipo Marconi, pero tuvo claro desde el primer momento que iba a vivir de alquilarla, aunque todavía no había salido la ley que lo permitiría. Y cuando instaló su centro emisor, se dio cuenta de que aquella zona era un paraíso, Martín Miguel, donde más tarde Hohenloe instaló un campo de golf
Registró muchas marcas, Radio Occidental, La Voz del Bajo Guadalquivir, Radio Marisma, siempre en su afán de ir por delante.

Estudió derecho y se hizo procurador y puso en marcha tantas mejoras para ese colectivo, que terminó siendo Decano de Honor del Colegio de Procuradores de Jerez.

Pero Paco fue un avanzado en muchas más cosas. Fue un héroe que sacó adelante a sus cinco niños, cuando quedó viudo a finales del siglo pasado. La conciliación de la vida familiar y profesional la inventó Paco. Es muy complicado sacar horas para tanto trabajo. Y Paco lo conseguía con su principal virtud. La paciencia. Nunca tuvo prisa para nada. Pero aunque parezca una contradicción, tenía que navegar a toda máquina para poder hacerlo todo…

Y entre tantas tareas, siempre tuvo una máxima: cuidar a sus amigos. Para lo bueno y para lo malo, ahí siempre estaba Paco. Lo más complicado del mundo, Paco lo hacía fácil. Los milagros los conseguía en 24 horas y lo imposible era cuestión de un par de días. Siempre con una sonrisa y quitando hierro a los problemas.

No me hago a la idea de que ya no va a comentar conmigo sus próximos proyectos, de su última idea, de su futuro invento. Pero estoy en la seguridad de que hoy, estará feliz de haberse encontrado, en la inmensidad del firmamento, con esa estrella que perdió y por fin ha recuperado. Descansa en la Gloria amigo Paco. Te vamos a echar mucho de menos.

Pepe García Ganaza