Tal y como avanzara la alcaldesa, María José García-Pelayo, la pasada semana, el Ayuntamiento ha dado un paso importante para hacer realidad su compromiso de “acercar la Universidad al centro” con la recuperación de la segunda Planta del Palacio Villapanés, una superficie que se encontraba en desuso y que el Gobierno local prevé ofrecer a la Universidad de Cádiz para la creación de un espacio de formación y administración.
La Junta de Gobierno Local aprobó hace escasos días la extinción de la concesión administrativa, que ostentaba la Fundación San Pablo Andalucía (CEU), para la ocupación y uso de la segunda planta del citado equipamiento. Del mismo, modo, el acuerdo ha incluido la reversión al Ayuntamiento de esta parte del edificio.
Así pues, mediante esta medida, el Gobierno recupera parte de este histórico inmueble, donde no existía actividad desde hacía años, ya que la Fundación San Pablo no utilizó estas instalaciones para el fin al que tenía destinado por convenio, como era la implantación de un centro de enseñanza reglada y oficial, motivo por el cual, se ha llevado a cabo esta declaración de extinción de la concesión administrativa.
Como ya explicara la alcaldesa, el siguiente paso será mantener un encuentro con el nuevo rector de la UCA, que tomará posesión de su cargo el próximo día 19, para trasladarle la voluntad del Gobierno de compartir “proyectos importantes para la ciudad, como puede ser la firma de un convenio entre la Universidad Internacional, la UCA y el Ayuntamiento para desarrollar Cursos de Verano en Jerez”.
En relación a ubicar la Universidad en el centro, la alcaldesa confirmó su compromiso de ofrecer a la UCA “la segunda planta de Villapanés para habilitar espacios destinados a actividades formativas o para uso administrativo. Ya tenemos toda la documentación preparada y ahora queremos abordarla conjuntamente con el nuevo rector y consensuarla con el nuevo equipo directivo”.
Cabe recordar que el Ayuntamiento inició este expediente el pasado mes de noviembre al objeto de recuperar una parte de un edificio de gran valor histórico y patrimonial que se encuentra en desuso, conforme a la prioridad de aprovechar los equipamientos municipales y optimizar los recursos disponibles, adaptándolos a las necesidades actuales.
