Una escultura de Gonzalo Torné representará el Premio Faustino Rodríguez-ACOJE

Un busto de Don Quijote realizado por el artista Gonzalo Torné (Jerez, 1949) será el Premio Faustino Rodríguez, galardón organizado por Acoje para reconocer la labor de una persona de la ciudad vinculada al sector de la hostelería. El premio a iniciativa de la asociación de comerciantes del centro de Jerez rinde homenaje al querido y añorado hostelero propietario del ‘BarJuanito’, fallecido el pasado 20 de febrero.

Se trata de una escultura que fue realizada por Torné con motivo del quintocentenario de la primera edición de ‘El Quijote’ de Miguel de Cervantes. La obra ha sido donada generosamente, sin contraprestación económica alguna por su autor, a la organización del premio por la amistad que le unía con Faustino Rodríguez, quien siempre presumía con orgullo de lucir un cuadro de Torné en el mejor espacio del patio de su bar de la Pescadería Vieja.

El artista jerezano afincado en Aranjuez considera que su obra “podría ser como el símbolo del emprendimiento, de buscar siempre el bien y lo mejor, y de no rendirse nunca”.

La escultura del Premio Faustino Rodríguez está forjada en la fragua Tío Juane de Jerezy tiene tras de sí una larga trayectoria de reconocimientos y de actos oficiales en los que han participado personalidades como la ReinaDoñaLetizia.

El ganador de este premio se dará a conocer en los próximos días tras la deliberación del jurado en base a las propuestas que ya han realizado la sección de asociados de lasección de Hostelería de ACOJE

SobreGonzaloTorné:

Reside y trabaja en Madrid y Aranjuez. Obtiene, en 1983, la Beca del Centro de Promoción de Artes Plásticas e Investigación de Nuevas Formas Expresivas del Ministerio de Cultura, y en 1986-87, y 1998-99, respectivamente, la Beca para la Creación Artística con Nuevas Tecnologías de la Pollock- Krasner Foundation Inc. New York. En 2001, recibe el encargo de la Diputación de Cádiz para la realización de una obra conmemorativa de la Constitución Española de 1812. Su trabajo pictórico, es la consecuencia de un largo proceso creativo iniciado en la década de los setenta. Tras una progresiva decantación de sus inquietudes iniciales, en donde se alternaban, tanto las referencias figurativas de, sobre todo, los pintores de la Nueva Figuración Madrileña, como Carlos Alcolea, Gordillo y Carlos Franco, y la abstracción de los herederos españoles de la Escuela de Nueva York, como José Guerrero y Esteban Vicente, Torné encuentra en el arte digital la traducción de la misma experiencia pictórica, es decir: la pulsión y el argumento, el color y el orden compositivo. Sus obras, desarrolladas con tecnología digital, existen en el mismo espacio atemporal en el que sobrevive la pintura, revindicando lo que tiene ésta de espacial desde sus parcos recursos. Así, el campo bidimensional de la superficie del lienzo, su densidad, y la justa permutación de la insistencia en unos pocos elementos, mediante el trabajo por ordenador, retrotraen, paradójicamente, a la misma esencia de la pintura. De entre sus exposiciones individuales destacan las realizadas en el Instituto Cervantes de Fez, Mekinech, Tánger y Marrakech, e Instituto Español de Nador (1996), Galería Linka, Ámsterdam (1998), Galería Heger, Oslo (1999), Barnes&Noble, Nueva York (2000), Arendi.com/everybody.net, (2001), Galería Versión, Madrid (2002). Fue el autor del cartel de la Feria del Caballo en 1991.

(Reseñapublicadaenmasdearte.com)