
Un conocido club de intercambios de parejas, situado muy cercano a la calle Porvera, ha sido precintado por la delegación de Urbanismo del Ayuntamiento de Jerez. Según informa lavozdelsur.es, el establecimiento ha sido cerrado por «el ejercicio de actividad recreativa no autorizada«, además de «carecer de papel alguno».
Debido a esta orden, el local ha tenido que echar el cierre. Desde su apertura, los vecinos han expresado sus quejas por lo poco decoroso del club de intercambios de parejas y el ruido de los consumidores a altas horas de la madrugada, sin embargo, el establecimiento contaba con porteros de seguridad que se encargaban en todo momento de asegurarse del exceso de ruido y de pequeños incidentes entre los socios.
De esta forma, el negocio tendrá que hacer frente al precintado del local y, para todos sus clientes habituales, podrá volver abrir sus puertas tras poner en regla todos los papeles y documentos necesarios para poder hacer estas prácticas en el interior del local.
Sobre el intercambio de parejas
El intercambio de pareja o swinging se refiere a un tipo de actividad sexual en el que tanto personas solteras como miembros de una pareja comprometida participan en actos sexuales con otras personas por propósitos recreativos. El intercambio de pareja es una forma de no monogamia que se experimenta en pareja, cuando ésta tiene una relación abierta. En general, el intercambio de pareja es caracterizado por la asistencia a eventos organizados donde los participantes tienen sexo con personas diferentes a su pareja establecida (si es que la tienen) a la vez que evitan el desarrollo de vínculos emocionales románticos (aunque a menudo surgen amistades). El individuo o pareja que incurre en estas prácticas suele denominarse swinger o «parejas liberales», tal y como se dieron a conocer en el Europa de 1975 en libros, prensa y revistas como la histórica.
También referido como estilo de vida basado en el intercambio de pareja, incluye un amplio rango de actividades sexuales realizadas entre parejas heterosexuales, bisexuales u homosexuales en un mismo local privado o inmueble particular. La comunidad BDSM también hace suya esta práctica referida como un estilo de vida.
Las personas pueden participar en este estilo de vida por una variedad de razones. Entre las citadas por miembros de esta comunidad están la de tener mayor calidad y cantidad de sexo, agregar variedad a una vida sexual por lo demás convencional, o por curiosidad, o por cumplir fantasías sexuales. Algunas parejas ven el intercambio de pareja como una válvula de escape saludable y un medio para fortalecer su relación. El término se refiere pues al comportamiento que reconoce y acepta la ampliación del horizonte sexual de la pareja, e incluye una amplia gama de actividades eróticas y sexuales realizadas entre una pareja y una o más personas.